Este año, la Rural de Palermo fue nuevamente una gran librería con todas las opciones de los ejemplares más disímiles, por supuesto que en la Feria del Libro Nº 36, que se llevó a cabo del 22 al 10 de mayo y cuyo lema fue"Festejar con libros 200 años de historias".La gente podía encontrar ofertas, precios, calidades diferentes, a algunos de los autores favoritos dando conferencias o bien presentando sus novedades, así como las ya tradicionales firmas de autógrafos, que siempre son parte del éxito.
Bolsitas pequeñas, grandes, medianas, podían verse en los visitantes y libros para todos los bolsillos, desde los minilibros a 1 $ que podían retirarse colocando una moneda en una máquina, a los libros más caros de las editoriales más prestigiosas, que realmente como dice el leit motiv, son del autor al lector, sin pasar por intermediarios.
Las revistas y los diarios se hicieron también presentes, obsequiando algunos ejemplares, así como también había algunas ofertas que podían ser de interés.
Muchísima gente paseando cada día, cada noche, familias paseando. Gente de todas las edades.
Se supo de algunas presentaciones algo problemáticas, pero felizmente, la mayoría fueron interesantes encuentros entre los autores presentados por celebridades del periodismo en algunos casos,
donde se pudieron encontrar cara a cara con un público fiel y maravilloso que esperaba formando largas colas para que le autografíen su libro o tomarse una fotografía.
Este año, particularmente, la historieta y el bicentenario tuvieron sus rincones, allí pudo encontrarse desde
una antigua aula de escuela, con sus pupitres característicos y el mapa, hasta caricaturas de los más representativos autores de nuestro país, Borges,
Horacio Quiroga (del que me resonaban sus maravillosos "Cuentos de la Selva", y
tantos grandes recordados por estas alegres caricaturas.
Así como gigantografías de los personajes de la historieta más queridos como
Clemente,
La Mulatona,
el Eternauta,
Mafalda,
Don Hinodoro Pereyra y el mendieta
junto a su autor,
el mismísimo negrito Fontanarrosa que no podía de ningún modo estar ausente en el recordatorio.
También en la parte de Comics, había
un Batman tamaño natural con el que uno podía fotografiarse.
El stand de la revista deportiva por excelencia, tenía a la Copa del Mundo Jules Rimmet, con la que uno podía también fotografiarse. Obviamente, que esta era una réplica, porque la verdadera, solo los campeones del mundo pueden tocarla.
Los granaderos de San Martín también eran protagonistas,
y parte del festejo del bicentenario en un enorme stand de la Presidencia de la Nación.
También desde el recuerdo permanente, poder sentarme con la querida negra Sosa, mientras canta alguna tonada acompañada por su bombo leguero.
Obviamente algún pequeño paquetito con algún que otro ejemplar, nos llevamos.
Pero por sobre todo, el recuerdo de una feria que con todas las ganas, acercó una vez más, a los lectores, a las editoriales, autores y por sobre todas las cosas, a la gente con la cultura.
Maravillosa feria del libro! Hasta el año que viene...
***Adriana Sabatelli***
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Gracias: María de Vedia y equipo
Pablo uno de los fotógrafos ocasionales - a la gente que posó conmigo, a los fotógrafos que me tomaron las fotos.
el resto de las fotos y nota: Adriana Sabatelli
